Permite tiempos más cortos de intervención y un menor sangrado, lo que facilita una recuperación más temprana y sencilla. Entre sus múltiples ventajas encontramos las siguientes:

• Ahorro  de  tiempo

• Ausencia  de  sangrado, lo  cual  constituye  una  herramienta  de  significativa importancia  ya  que  muchas  de  las  complicaciones  en  las  intervenciones quirúrgicas  se  pueden  dar  por  infecciones  por  las  gasas  utilizadas  para controlar  el  sangrado.  Además,  esta  ausencia  de  sangrado  puede  facilitar  la visibilidad  del  médico  mejorando  la  intervención.

• Asegura  una  buena  asepsia  y  elimina  las  posibilidades  de  transferir  una infección  desde  un  tejido  enfermo  a  un  tejido  normal.

• La  curación  de  las  heridas  toma  casi  el  mismo  tiempo  que  las  hechas  con  un escalpelo.

Un buen ejemplo de esto son las esterilizaciones donde la electrocirugía permite el sellado de todos y cada uno de los vasos sanguíneos sin necesidad de usar suturas convencionales lo cual disminuye considerablemente el riesgo de un sangrado posquirúrgico.

Formamos parte de la sociedad española de láser y electrocirugía veterinaria.